Capítulo 5. Versión original. Xavier Aguilera había vivido de la industria textil en Igualada, en una empresa familiar que llevaba generaciones funcionando. Pero el negocio se hundió en toda la comarca y tuvo que reinventarse. Era un apasionado de los globos aerostáticos, por lo que decidió montar una empresa de vuelos trísticos en este particular y aventurero medio de transporte. En semejante situación se encontró José Luis, un romántico motorista. Al quedarse sin trabajo no lo pensó dos veces y montó su taller especializado en Harley Davidson. Dice ser tan apasionado de lo que ha creado que no sabría hacer otra cosa.